En la cara externa de la placa de fibrocemento negra es la que tuvo mayor temperatura durante todo el proceso de medición. Variando entre 60.1ºC y 40.5ºC.
Las temperaturas de las probetas de Quincha (blanco) y Ladrillo (blanco) son muy aproximadas. Hay muy poca diferencia, es por eso que en la gráfica se confunden.
La placa de yeso blanca fue la que obtuvo menor temperatura superficial. Asimismo, fue la que tuvo menor transmisión de calor a su cara interna.
La probeta de fibrocemento pintada de negro, pese a ser una de las que alcanzó mayor temperatura, no llegó a transmitirla totalmente, ya que la temperatura en la cara interna de ésta se mantuvo entre 31 y 34 grados.
Los bloques de quincha y ladrillo son los que transmitieron menos calor a la cara interior, no llegaron a alcanzar altas temperaturas.
La diferencia entre la temperatura externa e interna del concreto es muy pequeña (2 grados máximo).
Notamos que el concreto negro fue el material que peor se comportó, puesto que la diferencia de temperaturas entre su cara externa e interna fue mínima. Deducimos que es, entre todos, el material que tiene el coeficiente de transmisión de calor más alto.
Se podría decir que las 2 de la tarde es la hora en la que la mayoría de los materiales alcanzan la mayor temperatura en su cara exterior. Esto se debe a que la temperatura bulbo seca es mayor a esta hora, aunque la radiación haya llegado a su punto máximo al mediodía. En la cara interior solo pasa esto con la quincha y el concreto negro.
Todas las caras externas de los materiales bajan su temperatura de 2 a 5 de la tarde. La mayoría de las caras internas suben, debido a la transmisión de la onda térmica por la inercia, su temperatura, excepto el concreto y la placa de fibrocemento negro.
Los materiales que mejor se comportaron frente a la transmisión dinámica de calor fueron: la quincha, la placa de yeso y la de fibrocemento blancos llegando tan solo a una temperatura de 32,8 en la cara interna.
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